Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Por los caminos de la pedagogía

La influencia de la educación es esencial para el desarrollo y la convivencia de cualquier sociedad. Ser consultor en educación, asesor docente en temas de comprensión de lectura, lectura crítica, evaluación, animación y promoción de lectura, me ha permitido conocer lugares y personas con saberes y prácticas significativas muy importantes, con un gran sentido de reflexión y apertura hacia nuevas maneras de hacer, pensar y sentir.  

Cada proyecto, cada consultoría, ha implicado un reto, pero también ha sido una gran oportunidad de aprendizaje. En la fase del proceso de formación docente del Proyecto Escuelas Lectoras, fui el encargado de compartir el módulo de comprensión de lectura, con sus referentes teóricos y prácticos. En la forma como estaba estructurada la formación, para este módulo se destinaban cuarenta horas. ¿Qué voy a hacer en cuarenta horas? Fue una de las primeras preguntas. De entrada, me parecía mucho tiempo, me embargaba la sensación de que antes de terminarse, habría concluido mi discurso. Por fortuna, siempre estuve acompañado de un gran equipo de Expresión viva, cuyo apoyo fue la clave para fortalecer las actividades.

Esperando la entrega de bibliotecas

El otro aprendizaje en estos procesos de formación, al que por fortuna llegué pronto, fue que el conocimiento se construye en colectivo, que se parte de las experiencias y conocimientos que tienen las personas, y que es a partir del diálogo y de un aprendizaje colaborativo como se obtienen los mejores resultados. Al final, debo decir, nos faltó un poco de tiempo para seguirnos escuchando, aprendiendo unos de otros. Fueron diez años recorriendo los municipios y veredas del Valle del Cauca y Cauca.

Como Asesor Pedagógico de Expresión Viva, también pude conocer e interactuar con docentes, estudiantes y comunidad educativa en Popayán, Cauca; Pasto, Barbacoas y Tumaco en Nariño, en diferentes proyectos, entre ellos, Diversos Lenguajes en el Aula. El aprendizaje en esta experiencia fue que cada territorio presenta características particulares, con prácticas educativas y comunitarias que tienen un sello personal.

Compartiendo lecturas

Guapi y Timbiquí, en la Costa Pacífica, hicieron parte, junto con otros municipios como Bolívar, Argelia, Patía, de los recorridos para acompañar a docentes y directivos en el fortalecimiento de los currículos de las instituciones educativas. Horas de diálogo, de trabajo compartido para aclarar el norte, el horizonte de sentido, la ruta hacia prácticas educativas con mayor riqueza en sus concepciones y acciones, dentro y fuera del aula. Percibir el currículo, desde sus componentes, características y variedades, fue hacer conciencia sobre su importancia y la necesidad de tenerlo como un documento clave, vivo, con gran capacidad de incidencia dentro en el quehacer pedagógico.

Lancha escolar, en algún lugar del Putumayo

Putumayo es un departamento rico, diverso, hermoso y complejo. Recorrerlo, desde el norte, en límites con el Huila, hasta el sur, en la frontera con Ecuador, ha sido una de las mejores experiencias. Además, visitar las instituciones educativas, algunas de ellos en resguardos indígenas, fue la posibilidad de aproximarse a culturas ricas, a sus formas de hacer, pensar, educar. Ser consultor para la Fundación Gestión Educativa, operadores del proyecto Con Paz Aprendemos Más, de Mercy Corps, permitió el intercambio de saberes y experiencias valiosas, formadoras, tanto en los Internados como en las instituciones educativas. Gentes maravillosas en una parte de este país que parece conformados por muchos países, con sus particularidades, riquezas, dificultades; aprendizajes que dan cuenta de maneras se ser, hacer, convivir; generosidad y disposición para el diálogo, la construcción colectiva de conocimientos.

Como escritor, he tenido la oportunidad de compartir con otras personas las reflexiones a las que he llegado a partir de mi experiencia, mis momentos de dudas, de desánimo, de dificultades para poner sobre el papel lo que la imaginación se empeña en trucar, es decir, hacer neblinoso lo que en primera instancia nos parece claro. Escribir es el proceso de esclarecer esos mundos posibles, soñados, imaginados, de tal manera que quien los lea, pueda percibirlos y darles ese toque especial desde su punto de vista particular como lector.

Haber estudiado arte, luego una Licenciatura en Literatura, y ahora ser candidato a doctor en Ciencias Pedagógicas, han sido las mejores elecciones, aunque persista, como un eco sutil, la pregunta que alguna vez alguien hizo, o ahora imagino que alguien me hizo: ¿De qué va a vivir? Del cuento, podría responder. El arte, la literatura, la pedagogía; pintar, escribir, aprender y compartir lo aprendido, sirven para eso, para vivir, para imaginar otros mundos, porque como dijo alguien, este no alcanza.  

También te puede interesar

EL REGRESO

EL REGRESO Pensé que era un fantasma. Estaba recostada al

CAMPEONA

CAMPEONA -Tráigame la otra, suegrita –dijo Rubén. En la pantalla,

González

González Lo primero que vio González al abrir los ojos

Inocencia

Inocencia     La abuela dejó de mecerse y la silla